Llevo muchos años siendo gamer, mas de los que puedo recordar (creo que empezó la cosa cuando tendría 5 o 6).
Empece con la típica Gameboy color y el pokemon, que en realidad era de mi hermana y lo heredé (despues de dar MUCHO por culo), y me la dio porque a ella le compraron la Gameboy Advance.
Años mas tarde conseguiría la mía, de ahí que haya dos Gameboys en la caja de las reliquias (donde conservo cartuchos de la Color y de la Advance a parte de las memory card de la Play 1 y 2).
Creo que en ese momento también teníamos la Play 1 en casa, pero era propiedad de mi padre aunque mi hermana y yo siempre le acompañábamos cuando jugaba (de ahí saque esta vena creo). Si no fue entonces, seria mas tarde. Aun conservo todos los juegos (piratas y originales).
Cuando tenia siete u ocho años mi padre me sorprendió en navidades regalándome la Play 2 (me puse histérica y a llorar) con el juego Colegas en el bosque, pero sin la Memory card. Al día siguiente tuvo que ir corriendo a buscarla. Fuimos ampliando nuestro arsenal hasta completar casi una estantería de juegos bélicos, de lucha y otros.
Al hacer la comunión me regalaron la Wii, pero la original, la blanca de toda la vida antes de todas esas pijadas de la Wii mini y la Wii U. Era una niña vestida de comunión agarrando la caja de su nueva consola como si le fuera la vida en ello. La otra mitad de la estantería se lleno de juegos de la Wii.
Hará cosa de dos o tres años (mas dos que tres), después de muchiiiisimo empeño conseguí que me compraran el timo mas grande de mi vida: la Play 3. No me estoy metiendo con la consola en sí, es una gran consola, me estoy metiendo con ese gran timo que es la versión Slim de 16 GB. Si fuera XBOX, vale, le puedes acoplar una memoria externa y todo arreglado. Pero Play es exclusiva, no las abren. Después de esos dos años quejándome de la Play, empece a buscar a alguien que me ampliara la memoria, pero nadie quería. Muy furiosa decidí algo; me compararía una XBOX 360.
Vendí todo lo relacionado con la Wii (saque 140 pavos, no es broma) y fui a mi tienda favorita, Game Shop, a comprar una de segunda mano. Tarde en tomar esa decisión dos días y justamente 10 minutos antes de entrar yo en la tienda había venido alguien a reservarla. Solo les quedaba la increíble y nada económica consola de edición limitada de Star Wars.
Fui a la otra tienda a ver si tenían, pero tampoco, asi que les dije que si recibían una me llamaran. DOS veces me llamaron, y para cuando llegue ya las habían vendido. Pero la segunda vez ocurrió algo distinto... Se lo dije a mi padre. Aporto el dinero que me faltaba para la de Edición limitada.
Tarde mas bien poco en convertirme de Play a XBOX, aunque aun conservo ese pequeño timo (porque tengo la saga de mis videojuegos favoritos y porque no me darían mucho por ella, aunque quizá algún día la venda). Ya llevo un mes con ella, y me arrepiento mucho de no haberme hecho de la familia Microsoft, ya que son unas consolas fantasticas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario